Pasillos infinitos, escaleras eléctricas, andenes repletos de personas y vestíbulos en los que se puede escuchar música. Así es el Metro de Madrid, una atmósfera en constante melodía, gracias a los artistas callejeros que ponen banda sonora a la rutina de miles de usuarios de este transporte. Se trata de artistas de renombre, que bien podrían tocar en las principales salas de concierto del mundo pero que, sin embargo, se conforman con hacer disfrutar a los demás con su voz y sus notas instrumentales en un lugar tan concurrido como es el suburbano de la capital.
A pesar de las trabas legislativas que ha impuesto en los últimos años el Ayuntamiento de Madrid, la red metropolitana continúa siendo uno de los espacios preferidos para que las bandas de músicos ensayen o, en otros casos, para que los artistas hagan disfrutar con sus humildes instrumentos a los usuarios del transporte público a cambio de unas cuantas monedas.
Los estilos musicales se mezclan dependiendo de la línea de metro en la que estés. Si paseas por los pasillos de la línea 1, una de las más largas y concurridas de la capital, podrás disfrutar del jazz en Plaza Castilla o del rock más puro en la céntrica parada de Atocha.
Melodías distintas pueden escucharse cerca del Barrio de Salamanca, en la estación de Diego de León, donde artistas anónimos se dan cita para desplegar un gran repertorio de los grandes éxitos de la música clásica.
Con un toque más desenfadado, el pop y el rock llega hasta las estaciones de Goya, Retiro o Las Ventas, donde una legión de músicos de categoría escriben notas musicales para cada paso que dan los usuarios del Metro de Madrid.
Melodías distintas pueden escucharse cerca del Barrio de Salamanca, en la estación de Diego de León, donde artistas anónimos se dan cita para desplegar un gran repertorio de los grandes éxitos de la música clásica.
Con un toque más desenfadado, el pop y el rock llega hasta las estaciones de Goya, Retiro o Las Ventas, donde una legión de músicos de categoría escriben notas musicales para cada paso que dan los usuarios del Metro de Madrid.
La música viene siendo una de las grandes protagonistas desde la puesta en marcha de la primera red de metro. En sus 95 años de historia, la red metropolitana de Madrid ha sido escenario de grandes obras musicales. Desde referencias ocasionales en las letras de canciones como fue el caso de 'Viva el Metro' (1978), del grupo Kaka de Luxe, en la que se quejaban del aumento de tarifas que experimentaba en aquella época el suburbano.
Portada grupo 'El Topo' |
Hasta el gran Joaquín Sabina compuso canciones en las que nombraba varias estaciones del Metro de Madrid. Entre ellas, 'Caballo de cartón', de 1984, en la que citaba numerosas y reconocidas paradas del suburbano como Tirso de Molina, Gran Vía o Tribunal.
Y más recientemente, El Canto del Loco también se apuntó a la moda de usar el transporte público para grabar uno de sus videoclips más famosos de la canción 'Eres tonto', lanzada en el año 2008.
Y más recientemente, El Canto del Loco también se apuntó a la moda de usar el transporte público para grabar uno de sus videoclips más famosos de la canción 'Eres tonto', lanzada en el año 2008.
Desde entonces y hasta ahora, el Metro de Madrid es un escenario privilegiado en el que numerosos músicos tienen la oportunidad de mostrar su música a ciudadanos y turistas que usan este medio de transporte para desplazarse por la capital.
Como viene siendo rutina, a las 8 de mañana Casio se levanta para ir a trabajar. Este guitarrista, de origen brasileño, es uno de los artistas que toca en el Metro de Madrid a diario. Él mismo reconoce que su jornada dura aproximadamente unas seis horas y va cambiando de estación “por variar”. En total, Casio puede llegar a ganar unos 60 euros al día, es decir más de mil euros al mes, y señala que “esta cantidad es superior a la que puedes ganar en cualquier otro trabajo bien cualificado en España”. Eso sí, el guitarrista afirma que la crisis también ha afectado a los músicos del Metro de Madrid, pues para él “antes la gente se paraba más y echaba unas monedas”.
Para otros, como Jorge, el dinero no es importante. Este violinista profesional, se conforma con “sacar una sonrisa a los demás”. Él, a pesar de haber dedicado su vida a la música, toca su instrumento para hacer feliz a miles de estudiantes que recorren los pasillos de la parada de Ciudad Universitaria cada día. Llegó a nuestro país desde Rumania en busca de “un futuro mejor” y se encontró con una España sumergida en una crisis económica, donde encontrar trabajo no era una tarea sencilla. Por ello, decidió hacer lo que a él más le motiva: tocar su violín, traído desde su país de origen, para ganarse la vida. Desde entonces, se ha convertido en uno de los artistas más reconocidos de todo el suburbano, gracias sus interpretaciones de las grandes bandas sonoras de películas históricas.
Algunos de estos artistas desconocidos, han llegado a impresionar a los usuarios del Metro de Madrid y se han hecho un hueco en el mundo de la música profesional. Es el caso del grupo 'Conciencia Urbana', un dúo formado por el cantante Adán Ojeda y el guitarrista Pedro Aldimayo, que consiguieron dejar con la boca abierta a los miles de espectadores, que mientras viajan en el metro de la capital disfrutaban de sus improvisaciones en forma de música.
Estar sentado en uno de los asientos de los vagones del suburbano y que entren dos músicos e interpreten canciones como la 'Para no verte más' es una práctica habitual, pero todo cambia si, con esa misma melodía, comienza la improvisación y añaden a la letra con referencias a los propios viajeros con bastante gracia.
Su simpatía y originalidad, les convirtieron en uno de los grupos preferidos del Metro de Madrid, espacio en el que consiguieron triunfar en las redes sociales.
Conciencia Urbana en una de sus actuaciones en el Metro de Madrid |
Estar sentado en uno de los asientos de los vagones del suburbano y que entren dos músicos e interpreten canciones como la 'Para no verte más' es una práctica habitual, pero todo cambia si, con esa misma melodía, comienza la improvisación y añaden a la letra con referencias a los propios viajeros con bastante gracia.
Su simpatía y originalidad, les convirtieron en uno de los grupos preferidos del Metro de Madrid, espacio en el que consiguieron triunfar en las redes sociales.
El Metro de Madrid no dispone de una legislación que regule la presencia de músicos
Madrid es el único metro de España que no tiene una legislación específica que controle la presencia de músicos en este espacio público, hecho que le diferencia de comunidades como Valencia o Barcelona, donde sí cuentan con una estricta regulación.
El suburbano de la capital catalana aprobó en el año 2011 un programa llamado 'Músicos del Metro'. Dos veces al año, un jurado escucha a aquellos artistas interesados en tocar en los pasillos de la red metropolitana para otorgar, de forma justa, unas 300 acreditaciones que permiten la música en este transporte público. En ningún caso, las autoridades de Barcelona permiten actuaciones de artistas que no hayan conseguido esta acreditación ni dentro de los trenes, como sí se hace en Madrid.
Cada mañana los artistas catalanes se reúnen para decidir, por sorteo, las estaciones donde tocarán sus instrumentos y, además, cada año se organiza el reconocido Festival de Músicos en el Metro, un maratón de conciertos que organizan los diferentes intérpretes que tocan con regularidad en el suburbano.
En el caso de Valencia, la regulación consiste en que diferentes agrupaciones de músicos urbanos deciden, a través de pruebas musicales, quién toca y quién no en los vestíbulos y andenes de este transporte público. Como en el caso de Barcelona, en ningún caso se permite toca en el interior de los trenes.
Así, el metro de la capital es el único en el que los músicos pueden tocar libremente, sin verse sometidos a ningún tipo de restricción. Así lo deja claro el departamento de comunicación de la empresa, que mantiene que se permite la entrada libre a los músicos, aunque se especifica que no se puede tocar en los trenes ni en los andenes.
Mientras se resuelve lo legislativo, tocar en el Metro de Madrid se convierte en una actividad diaria para más de 200 artistas. Más que por dinero, estos músicos buscan sacar una sonrisa a sus múltiples espectadores.
Para Patricio, que aprovecha su día libre en el trabajo para hacer resonar su música en el metropolitano de la capital, “lo más gratificante es ver cómo las notas pueden hacer cambiar los estados de humor de las personas”, pues la música fue y sigue siendo la gran protagonista del Metro de Madrid.
Para Patricio, que aprovecha su día libre en el trabajo para hacer resonar su música en el metropolitano de la capital, “lo más gratificante es ver cómo las notas pueden hacer cambiar los estados de humor de las personas”, pues la música fue y sigue siendo la gran protagonista del Metro de Madrid.